Cultivan el mate originario y extraen las hojas que crece en las crestas de los árboles del bosque de Tavapy en Paraguay. Lo hacen como sus antepasados y obtienen una hierba con un sabor único que recuerda a las raíces ancestrales de América.
Recientemente la Deutsche Welle publicó un reportaje sobre las mujeres del bosque de Tavapy. Una comunidad de mujeres luchadoras que, retomando sus raíces guaraníes, cultivan las hojas de la hierba mate. El Ka’a, como se llama el mate en guaraní, que ellas producen es cosechado y cultivado siguiendo las formas tradicionales. Eso permite rescatar el auténtico sabor de una bebida que cautiva a los habitantes del Sur de América.
El mate originario y la soja
La comunidad de Tavapy de doce mil habitantes aproximadamente se encuentra en los Altos del Paraná. Una zona agrícola donde el cultivo de soya es predominante; alrededor del 60% de las hectáreas disponibles se dedican a este rubro. En cuya producción utilizan herbicidas como el glifosato. Acusado por la Organización Mundial de la Salud, como probablemente cancerígeno en humanos.
Por eso, que un pequeño grupo de mujeres se dedique al cultivo del mate originario en una extensión de bosque atlántico de 200 hectáreas reviste de mucho valor. Detienen la expansión de los cultivos de soja en la zona, que van ligados a la deforestación, mientras rescatan la producción de mate originario.
Mate sin glifosato
La labor de las campesinas de Tavapy por rescatar sus cultivos ancestrales, para ofrecernos un mate, procesado al igual que lo hacían los guaraníes, tiene una serie de beneficios colaterales. El mate originario que ellas venden, aunque aún no está catalogado como orgánico, lo cultivan desde hace más de cinco años sin utilizar glifosato en el cuidado de los árboles. Todo el trabajo de desmalezamiento de las plantas es manual, lo que implica un mayor esfuerzo, así como mayores niveles de pureza en el producto final.
Por otra parte, cuidan el bosque atlántico, garantizando la supervivencia de este bioma. Mientras obtienen el dinero necesario para ayudar en el sustento de sus familias. Este proyecto cuenta con el apoyo de la WWF (World Wide Fund for Nature) una de las ONG de mayor importancia en la conservación del ambiente.
El mate originario de las mujeres de Tavapy será comercializado bajo la marca de “El Bosque”.
Leer reportaje en DW
Para envío de información:
Ver vídeo de la DW:
También te puede interesar:
https://mujerdelsur.cl/medicos-en-peligro-por-escasez-de-equipos-de-proteccion/